El sitio tiene su tradición y misterio, pero eso no es solo lo que tiene este lugar. Muchas habitaciones muestran el paso del tiempo y la elegancia de aquellos días.
El museo es grande y tiene muchos lugares para admirar y ver. Algunas habitaciones habían cambiado para poder mostrar exposiciones y otras obras de arte.
El acceso te lleva al pequeño patio trasero, y el recorrido comienza de inmediato. Comienza con la cocina de la abadía, cubierta con azulejos de Talavera, la famosa cerámica del estado.
La cocina es bellísima porque se asemeja a la arquitectura antigua del siglo XVII. Varias personas pueden usar la cocina simultáneamente, como en la antigüedad.
Solo imagina el olor. Solo los españoles pueden usar la cocina. Las mujeres indígenas solo servían como sirvientas, y la elaboración de alimentos solo estaba permitida a las monjas.
Cerca de la cocina había una habitación grande sin ventanas. La habitación tiene un aislamiento perfecto que sirve como refrigerador. Junto a la cocina estaba el comedor. Suficientemente grande para todas las monjas.
La mayoría de las cosas que tenían eran regalos de las familias de las monjas y patrocinadores que ayudaron al convento. Algunas familias adineradas pagan para que las monjas puedan estar allí.
La arquitectura de todo el museo es exquisita. Habitaciones con una vibra que te transporta a otra época. Si tienes la oportunidad de visitar este lugar, por favor hazlo.
Me gusta que dentro del museo encontrarás otras recetas y citas de la cocina mexicana.
El primer piso es más una exposición extensa con las salas divididas. El piso se utilizó más como área común para el uso de las monjas. Solo puedes imaginar la inmensidad del lugar.
En el segundo piso, explorarás las habitaciones de las monjas y algunas áreas que no creerías si no estuvieras allí.
Dos habitaciones me llamaron la atención. Una es la habitación principal y la habitación para el cuidado de las monjas enfermas.
Un espacio en particular se sentía más como parte de una prisión. En esta sala, las monjas pueden estar presentes los días domingos. Tienen una valla con grandes agujeros para poder escuchar y estar presentes el domingo. El propósito de la cerca era ser utilizado como balcón. Las monjas no pueden salir de la abadía. Estaba prohibido.
A través de la cerca, pueden participar con la comunidad. Uno de los participantes iba a ser el coro de la iglesia.
El paso del tiempo de la abadía.
La abadía cambia varias veces el uso. Un evento que cerró el uso del monasterio por parte de las monjas fue una declaración del presidente Benito Juárez de que las propiedades en posesión de la iglesia católica serían parte del gobierno, las monjas serían desalojadas y no regresarían. Entonces la abadía formaba parte de un almacén y de un barrio.
El gobierno recuperó la propiedad como museo y le dio un nuevo comienzo a la propiedad y la historia del estado de Puebla.
Se llama Mole, pero los nativos ya llamaban Molli a la salsa. El Mole es una mezcla de ingredientes:
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Canela
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Chile Chipotle
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Piloncillo, Sugar cone
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Ajonjolí
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Chile Mulato
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Cacahuates
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Almendras
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Tortilla Quemada
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Anís
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Cebolla
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Tomate
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Chocolate
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Ajo
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Cominos
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Pumpkin seed
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